La FAPE contra el periódico El Mundo y su periodista Quico Alsedo

El 13 de febrero de 2020, Isabel Poncela, representante de la Asociación de Periodistas de Aragón, denunció mediante un Escrito el artículo redactado por Quico Alsedo para el diario El Mundo. El artículo en cuestión, publicado el 20 de enero de ese mismo año, hacía en varias ocasiones referencias a una supuesta relación entre el asesino de pseudónimo “Igor El Ruso” y la popularización o aumento de la fama del partido político Teruel Existe.

Para contextualizar, “El Ruso” fue condenado por triple asesinato en Andorra el 14 de diciembre de 2017. Su historial no cesó ahí pues ya había realizado hurtos con violencia en diversas zonas de Teruel y, una vez ingresado en prisión, atentó en repetidas ocasiones contra guardias de la cárcel.

De vuelta a la carta de la denuncia, la presidenta de la Asociación apeló contra sus reiteradas faltas a la verdad y al “compromiso ético del periodista del respeto a la verdad” de los principios de la FAPE, por la publicación de hechos sin comprobar, argumentar, verificar y contrastar. El propio titular que aparece en la fotografía ya incluía la versión subjetiva del periodista, con “el asesino que impulsó a Teruel Existe”, lo que agrava la falta en sí debido al gran alcance que pueda llegar a tener un titular. Además, asegura que “basa su argumentación en una serie de afirmaciones gratuitas que no aparecen fundamentadas”. El escrito hace hincapié una vez más en la la necesidad de fundamentar las informaciones que difunda y en contrastar las fuentes, justo antes de finalizar.

Quico Alsedo se defendió a través de su abogado, Juan Luis Ortega Peña, aportando diversos argumentos, la mayoría de ellos incoherentes, o sin relación al asunto que concernía a la reclamación:

  • En general sus alegaciones defendieron esa supuesta validez del subjetivismo y opinión personal, no solo durante el texto, sino también en el título, por su ubicación en el periódico: la sección de sociedad. Aun así, esto no valida, ni tampoco explica la falta de contraste, o al menos, una explicación al porqué de hablar sobre una supuesta relación entre partido político y asesino. Para justificarse debería añadir explicaciones, datos relevantes o hechos que durante su investigación lo hubieran conducido hasta ese juicio, mientras que de alguna manera solo se condena a sí mismo al argumentar que tanto titular como texto “no hace otra cosa que valorar subjetivamente cómo los hechos descritos en el reportaje…”. Con subjetivamente, afirma que es un juicio suyo y de nadie más.
  • En segundo lugar, el abogado señaló que el periodista se transportó al lugar de los hechos entrevistando a varias personas relacionadas con el suceso, declaraciones que aparecen entrecomilladas y añadidas de manera literal. Esto es todo verídico, puesto que sí que contestó informaciones e hizo una investigación profunda, y hubiera sido útil para la defensa del periodista si tuviera algo que ver con el tema del que habla el titular, la cuestión de la denuncia a la Comisión. Sin embargo, los citados solo testifican sobre la falta de protección en la zona y necesidad de un aumento de guardias civiles en la provincia, el miedo que vivieron en la época de la matanza de 2017, no de una relación entre el aumento de la fama del partido con las muertes.

Son cuestiones completamente distintas que no sirven al acusado para quedar exento, puesto que no conciernen a la vinculación que realiza, además reiteradamente, durante el artículo:

  • En el ya mencionado titular
  • En el primer párrafo (refiriéndose a “El Ruso”) “Catalizador involuntario del fenómeno político del año: Teruel Existe”.
  • Y una vez más en el cuarto párrafo: “en una revuelta que ahora, do años después, ha supuesto un escaño más para Teruel existe”.

Todo ello dentro del contexto de que, sí, una vez expuesta la defensa del denunciado se ha presentado todo ello como hechos como subjetivos, pero para los lectores, esas informaciones eran ciertas y fundadas, gracias el uso de distintos verbos que ratifican que ocurriera de verdad con el uso del indicativo. No contaron con ninguna advertencia que los avisara de que lo que iban a leer eran conjeturas de Alsedo, esté o no en sociedad, lo que insisto, carece de relevancia a la hora de tomar esas libertades. Ellos leyeron aquella sección del periódico como algo que de verdad estaba comprobado y estudiado.

En resumen, para nosotras su defensa no justifica las licencias tomadas por Quico Alsedo y, juicio subjetivo o no, sería útil y necesario que agregara alguna explicación para que el lector comprendiera cómo ha llegado a estimar que “El Ruso” y la fama de Teruel existe están relacionados. Por tanto, la decisión de la FAPE nos parece la acertada.

Lidia Alonso, Lucia Bastos, Carmen Bengoechea.

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