elDiario.es se lleva el podio en cuanto a distribución de piezas por diario con aproximadamente un 43%
Fuente: El Mundo
Un estudio reciente examinó el manejo detallado de la personalización en la cobertura de escándalos políticos por diversos diarios españoles, evidenciando notables diferencias en la atribución de responsabilidades, la mención de transgresiones y la cobertura crítica a la monarquía, según la línea editorial de cada medio.
elDiario.es se destaca como líder en la distribución de piezas, abarcando alrededor del 43% del total por diario, lo que resalta su significativa presencia e impacto en la cobertura de escándalos en el panorama mediático. Mayoritariamente, periódicos como El País, El Mundo, El Español y ABC tienden a atribuir responsabilidades, principalmente al rey emérito Juan Carlos I, en lugar de responsabilizar a la institución monárquica. Esta marcada individualización de la responsabilidad subraya al rey emérito como figura central en los escándalos objeto de estudio.
Los diarios digitales, como elDiario.es y El Español, adoptan una postura más crítica al abordar la cobertura de la monarquía en comparación con los medios de prensa tradicionales. Esta inclinación alberga influencias de la naturaleza más dinámica de la cobertura en línea y la audiencia específica a la que apuntan estos medios digitales.
Fuente: Propia
La divergencia enfoques resalta la interacción compleja entre diferentes medios, públicos y narrativas en el contexto de la cobertura de escándalos políticos a nivel nacional. Además, elDiario.es, una vez más es reconocido como el medio que más alude a la vida privada de Juan Carlos I, especializándose en sus relaciones amorosas, mientras que hay escasas alusiones a sus características personales, lo cual plantea interrogantes sobre la naturaleza de la cobertura mediática en el ámbito político y personal.
El estudio subraya también la importancia de entender cómo los medios abordan la cobertura de este tipo de informaciones, mostrando la diversidad de enfoques según la línea ideológica y estrategias editoriales de cada periódico, así como la influencia significativa de los medios digitales en la configuración y presentación de estos escándalos. El tratamiento de este tipo de noticias por parte de los medios, ya sea con una atribución mayoritaria de responsabilidades, al rey emérito Juan Carlos I, o con una postura crítica hacia la institución monárquica, requiere una consideración cuidadosa de los principios éticos que rigen la labor periodística.
Aspectos como el respeto a la verdad y la veracidad de la información revela una relevancia fundamental en este contexto. Los códigos deontológicos del periodismo enfatizan la importancia de presentar información precisa y contextualizada, evitando la tergiversación de hechos o la difusión de noticias falsas. Por tanto, la cobertura de escándalos políticos debe basarse en una investigación sólida y en la presentación equilibrada de los hechos para evitar generar una percepción errónea en la opinión pública.
Asimismo, el tratamiento ético de la información demanda un cuidadoso equilibrio entre el interés público y el respeto a la privacidad de las figuras involucradas. En el contexto de referirse a la vida privada del rey emérito, es crucial que los medios se adhieran a una ética que evite la invasión innecesaria de la esfera personal, aun cuando se aborde el comportamiento de figuras públicas. Además, la diversidad de enfoques según la línea editorial de cada medio subraya la importancia de presentar una variedad de perspectivas, evitando la parcialidad y favoreciendo la presentación equitativa de diferentes puntos de vista. Esta diversidad ética en la cobertura mediática permite una comprensión más completa de los escándalos políticos que se encuentran bajo escrutinio, en línea con la responsabilidad del periodismo de proporcionar información imparcial y variada.
La ética periodística en el tratamiento de escándalos de este ámbito requiere una adhesión rigurosa a los principios fundamentales de veracidad, equilibrio, respeto a la privacidad y diversidad de enfoques. A raíz de esto, es esencial que los medios mantengan un compromiso sólido con la objetividad, la integridad y la responsabilidad en la presentación de información de interés público, contribuyendo así a una comprensión informada y ética de los asuntos políticos relevantes para la sociedad. ¿Qué opináis de esto? Si vosotros tuvierais un medio de comunicación, ¿cómo actuaríais ante este tipo de informaciones?
Andrea Aparicio, Silvia García y María García Luquero