El periódico israelí más conocido y leído en inglés, The Jerusalem Post, ha publicado recientemente en X un artículo que plantea la guerra como una forma para perder o ganar kilos bajo el titular ‘Cómo usar el estrés de la guerra entre Hamás e Israel para perder peso’. Dicho artículo, en el que se citaban declaraciones de un doctor afirmando que «momentos como este pueden favorecer un exceso de calorías», ha corrido como la pólvora en esta red social. ¿No es una salvajada considerar que la guerra es una oportunidad para adelgazar? ¿Es necesario publicar estos artículos? ¿Es realmente relevante? ¿Deberían penalizar al periódico por la publicación de estas informaciones?. Expón tu opinión en los comentarios.
No se debería hablar en un periódico de “adelgazamiento” sino de salud. En mi opinión, da igual si es un experto o es un periodista (que no debería hablar de temas tan importantes sin haberse informado con un especialista antes) que ambos no deben generalizar. Los problemas de un conflicto son mucho mayores que el físico… Quizás pensaron que publicando eso sería una publicación más relajada para un momento muy complicado, pero aun así yo creo que lo importante sería hablar de la salud. Hablar del físico de gente que quizás no tenga comida ni casa me parece reírse en la cara de ellos. Desde luego no es necesario publicar estos artículos, no tienen sentido ni valor informativo. No se si se les debe penalizar por que con estos artículos se perjudican a sí mismos perdiendo lectores y dándose una mala imagen mundial.
En la sociedad actual, están tan integrados los cánones de belleza que asusta, en que momento un periodista asemeja que a una guerra le puedas ver el lado positivo ya que vas a bajar de peso. Lo primero y mas importante en una guerra no hay nada lo suficientemente bueno como para contrarrestar sus efectos negativos. Por otro lado, estamos en el siglo XXI y hay una cantidad ingente de problemas alimentarios. actualmente se ha puesto «de moda» una delgadez extrema que en muchos casos no es sana. Si te pasas por un hospital encontrarás en la planta de enfermedades mentales millones de adolescentes con trastornos alimenticios. Y esto se debe a que muchas veces se te juzga por un físico antes de una personalidad. Que este problema ya no este solo en redes sociales sino que ahora un medio de comunicación conocido escriba y asemeje dicho tema con algo positivo y más en una guerra me parece de vergüenza. Cuando creo que está hablando desde una posicion que carece de información sobre un asunto tan importante como este. Creo que es un artículo de relleno y que si de verdad quieren publicar esta idea, ya que les parece importante deberían de contar con la ayuda de expertos en el tema para poder hablar con cierto rigor periodístico.
En la sociedad actual, están tan integrados los cánones de belleza que asusta, en que, momento un periodista asemeja que a una guerra le puedas ver el lado positivo ya que vas a bajar de peso. Lo primero y más importante en una guerra no hay nada lo suficientemente bueno como para contrarrestar sus efectos negativos. Por otro lado, estamos en el siglo XXI y hay una cantidad ingente de problemas alimentarios. actualmente se ha puesto «de moda» una delgadez extrema que en muchos casos no es sana. Si te pasas por un hospital encontrarás en la planta de enfermedades mentales millones de adolescentes con trastornos alimenticios. Y esto se debe a que muchas veces se te juzga por un físico antes de una personalidad. Que este problema ya no este solo en redes sociales, sino que ahora un medio de comunicación conocido escriba y asemeje dicho tema con algo positivo y más en una guerra me parece de vergüenza. Cuando creo que está hablando desde una posición que carece de información sobre un asunto tan importante como este. Creo que es un artículo de relleno y que, si de verdad quieren publicar esta idea, ya que les parece importante deberían de contar con la ayuda de expertos en el tema para poder hablar con cierto rigor periodístico.
Miguel Casariego Cao, Andrés Barreira, Alba Calle
El conflicto entre Israel y Palestina es un tema profundamente arraigado en la historia, la política, la religión y la identidad cultural. Ha generado sufrimiento, pérdidas humanas y una lucha constante por la tierra, los derechos y la autonomía. Cada aspecto de este conflicto está cargado de emociones, memorias históricas y realidades contemporáneas que afectan a millones de personas en la región.
Relacionar un conflicto tan intenso con un tema como la pérdida de peso puede ser desafortunado e incluso irrespetuoso para quienes están directamente involucrados en él. Utilizar la narrativa de un conflicto bélico para ilustrar un proceso de adelgazamiento puede trivializar la gravedad y la complejidad del conflicto en sí mismo, así como minimizar las experiencias de aquellos que están inmersos en situaciones de guerra y conflicto real.
La noticia es escrita por el periódico The Jerusalem Post, por lo que el target al que va dirigida es un público judío que es totalmente proisraelí dentro del conflicto. La finalidad de la noticia es cambiar un poco de tema, debido a que el público del periódico lleva leyendo centenares de noticias todos los días hablando de las pérdidas humanas, económicas y sociales que se están desarrollando durante el conflicto. En mi opinión, lo que buscaba el periódico es publicar una noticia como la de este estilo buscando hablar de otros aspectos que se producen a lo largo de una confrontación como esta, tratándole de quitar el hierro a lo realmente importante, aunque a simple vista parezca muy desafortunado comparar un proceso de adelgazamiento con un proceso de tal magnitud como el conflicto entre Israel y Palestina.
En definitiva, es esencial ser consciente de cómo se abordan los temas sensibles en el ámbito público y mediático, mostrando empatía y consideración hacia las personas y comunidades afectadas. El respeto, la sensibilidad y la responsabilidad son fundamentales al tratar temas delicados como los conflictos bélicos, que tienen un impacto profundo y duradero en la vida de tantas personas.
Lo que realmente deberíamos cuestionarnos no es si es ético o no publicar un artículo sobre el estrés bélico como método de adelgazamiento, sino en qué momento a un periodista se le ocurre hacer un artículo sobre ello. Si el que su país este siendo testigo de un conflicto de tal calibre no es motivo suficiente para abordar temas de interés o al menos ser mínimamente consciente de las penurias que esta viviendo un gran porcentaje de tus compatriotas, su empatía a nivel personal debería apelar en cierto modo a su conciencia. Por supuesto, si quedaba algún atisbo de duda, no es para nada ético el tema de este artículo y desde mi punto de vista alguien debería llamar la atención a ese periodista antes de que sus palabras, o bien hagan un daño mayor a alguien, o lleguen a quien no deban.
La elección de utilizar un conflicto bélico como base para un artículo sobre adelgazamiento plantea serias cuestiones éticas y de sensibilidad. Presentar la guerra, un evento cargado de sufrimiento y consecuencias devastadoras, como una oportunidad para perder peso es, en el mejor de los casos, insensible y, en el peor, trivializa la gravedad de la situación.
La decisión del periódico The Jerusalem Post de publicar dicho artículo parece carente de juicio ético y humanitario. Utilizar el estrés de un conflicto armado como un supuesto medio para perder peso es una perspectiva altamente inapropiada y despectiva hacia las vidas afectadas por la guerra.
Esta elección editorial plantea preguntas sobre la responsabilidad periodística y la ética en la presentación de contenidos. ¿Es necesario recurrir a tal sensacionalismo para atraer la atención del público? ¿Debería penalizarse al periódico por su falta de consideración hacia las víctimas y la gravedad de la situación? En última instancia, la ética y la sensibilidad deben prevalecer sobre el afán de generar controversia o interés, especialmente cuando se trata de situaciones tan delicadas como un conflicto bélico.
Firmado, Álvaro Gutiérrez Chapado, Inés Gutiérrez González y Alejandro Revilla Benito.
Desde nuestro punto de vista, la decisión de The Jerusalem Post de publicar un artículo que sugiere aprovechar el estrés de un conflicto bélico para perder peso es altamente insensible y carente de ética. La guerra es una tragedia humana que no debería ser trivializada con el propósito de promover objetivos personales como la pérdida de peso. Este enfoque periodístico irresponsable demuestra una falta de respeto hacia las víctimas y desplaza las prioridades fundamentales durante situaciones de crisis.
La afirmación de un supuesto experto médico, que sugiere que momentos de guerra pueden favorecer el exceso de calorías, es peligrosa y podría promover conductas poco saludables. La pérdida de peso debe ser abordada de manera segura y equilibrada, no aprovechando tragedias humanitarias para obtener beneficios personales.
Este tipo de periodismo superficial no solo carece de relevancia, sino que también socava la credibilidad del medio de comunicación y contribuye a una cultura irresponsable. Sería apropiado considerar penalizaciones para el periódico, ya que la publicación de este tipo de contenido va en contra de principios éticos y contribuye a la desinformación.
Alejandro Alonso, Rodrigo Carravilla, Nicolás Delibes
La publicación de este tipo de artículos por parte de los agentes mediáticos israelíes tiene una clara intención de intentar desviar el foco mediático y quitar hierro al asunto de la guerra. De esta manera están equiparando que estén muriendo personas, así como el hecho de que haya israelíes de rehenes en territorio palestino, con temas tan banales como son el ganar o perder peso.
Cuando está sucediendo un conflicto bélico en tu país, esto es lo menos importante que te puede ocurrir. Cabe destacar que, en el otro lado de la franja, la gente se esta muriendo de hambre porque no puede acceder a los alimentos debido a que apenas entra ayuda humanitaria en su territorio. Por lo tanto, la publicación de este articulo esta totalmente fuera de la ética y moral humana.
Además, la distribución de este tipo de artículos no hace más que contribuir a la aparición de trastornos alimenticios en la población. Muchas personas en el siglo XXI sufren de este tipo de trastornos como anorexia o bulimia. Por su parte, los medios de comunicación deberían de contribuir a la desaparición de los complejos que rodean la talla de las personas.
Por otro lado, me parece aún más reprochable que el medio que publique este tipo de noticias sea uno enfocado en temas de política y actualidad. También es reseñable el alcance de las publicaciones de The Jerusalem Post, siendo este el periódico israelí en lengua inglesa más leído en el mundo. En ningún momento un articulo de este estilo es de relevancia para la población y mucho menos cuando hay humanos muriendo a causa de dicha guerra, así como personas que seguramente estén sufriendo trastornos alimenticios y sean lectores de este medio.
Fdo: Marina Cabrero Duque, Marta Gamazo Rodríguez, Daniel Majerna y Daniel Mangas Diez
El hecho de que se aproveche una guerra para publicar artículos como el citado es sin duda el pico del absurdísimo. A qué punto ha llegado la sociedad para hacer burla de una guerra que se cobra miles de vidas, a través de un supuesto estudio de las ventajas para adelgazar que tiene el estrés al que están sometidas las víctimas.
Se debería penar al medio y al periodista por esta clase de artículos, ya que son un falta cara a las víctimas. Pero sin duda es algo que se esta produciendo entre los medios israelís. La viralización de trends en redes sociales burlándose del pueblo Paquistán, de videos de victimas desesperadas.
Sin duda una situación que se está yendo de las manos en el momento que hasta los medios de Israel se ríen de la situación en la que se encuentra Paquistán. La falta de respeto y moral hacia las victimas además de la poca empatía que se puede observar. En redes sociales, sobre todo.